Por Jack Fleitman
La definición de
la consultoría de empresas la podemos enmarcar de la siguiente manera: es un
servicio al cual los propietarios, directores de empresas y funcionarios
públicos pueden recurrir si sienten la necesidad de ayuda o asesoría en la
solución de problemas.
Es proporcionar
recomendaciones viables e implantar medidas apropiadas para aumentar la
productividad y la competitividad de las empresas. El uso de
consultores de empresa tuvo su origen en las economías de mercado libre y actualmente
es más común en los países altamente desarrollados. En Estados Unidos
de Norteamérica existen más de 5000 firmas de consultoría de empresas que
constituyen un sector importante de los servicios profesionales.
Las cifras son
relativamente inferiores en Europa, pero en el Reino Unido y en muchos otros
países europeos, el crecimiento de la consultoría ha sido muy notable los
últimos 25 años. Los países desarrollados, las grandes empresas, las medianas e
incluso las pequeñas, emplean frecuentemente los servicios de consultores
profesionales.
En los países en
desarrollo, la profesión de consultor, se puede considerar como nueva, sin
embargo se observa una tendencia general en la contratación de consultores
especializados.
En algunos
países, las empresas pequeñas disponen de servicios de consultoría subsidiados
por los gobiernos, como parte del fomento de la pequeña empresa.
El trabajo del
consultor empieza al surgir alguna situación insatisfactoria y susceptible de
mejora y termina, idealmente, en una situación en que se ha producido un cambio
que constituye una mejora.
Las
características más importantes de la consultoría de empresas son los siguientes:
·
La
consultoría es un servicio independiente, que se caracteriza por la experiencia
e imparcialidad del consultor.
·
Su
papel es el de actuar como asesor, con responsabilidad por la calidad e integridad
de sus consejos.
·
La
consultoría es un servicio que proporciona conocimientos y capacidades profesionales
para resolver problemas prácticos.
·
La
consultoría no proporciona soluciones milagrosas. Seria un error suponer que
una vez que se ha contratado un consultor, las dificultades desaparecen.
·
La
consultoría es un trabajo difícil basado en el análisis de hechos concretos y en
la búsqueda de soluciones originales y factibles.
·
La
consultoría debe dar resultados tangibles, concretos, específicos y congruentes
en términos de tiempo y costo.
·
La
empresa debe ver la contratación de una buena consultoría como una inversión y
no como un gasto en términos de lo que va ganar con ella.
·
El
carácter de la consultoría exige que toda situación sea vista en la perspectiva
de oportunidades futuras.
·
El
cambio es la razón de ser de la consultoría, cambios que mejoren el rendimiento
de las empresas y al mismo tiempo, hagan más interesante y satisfactorio el
trabajo del personal.
·
El
consultor profesional debe estar estrechamente relacionado con el diseño, difusión
y conocimiento de los nuevos sistemas, métodos y técnicas de dirección,
administración y operación.
·
El
consultor debe actuar como promotor de cambio y asegurar la máxima participación
del cliente en todo lo que hace, de modo que el éxito final se logre con el
esfuerzo de ambos.
·
La
cooperación entre el cliente y consultor son tan importantes para el resultado final,
como la calidad del consejo del consultor.
La mayoría de los
empresarios tiene diferentes problemas en la administración y operación de su
empresa, también la mayoría de las veces saben que necesitan hacer algo, pero
no saben exactamente qué y como, por lo que es aconsejable acercase con
consultores expertos en desarrollo empresarial
Existen
varias formas de proporcionar consultoría, entre las que destacan:
·
Resolver
una necesidad o un problema específico.
o
La
contratación de un servicio externo se da cuando el empresario define una necesidad
o tiene un problema específico, pero no tiene el personal ni el tiempo para
solucionarla y busca especialistas que lo ayuden.
·
Asistencia
en diagnóstico.
o
El
empresario tiene necesidad de asistencia en diagnóstico, cuando detecta los síntomas
de la enfermedad, pero no sabe diagnosticar la causa de los problemas y
contrata expertos para que revisen la empresa y descubran las áreas o procesos que
limitan el adecuado funcionamiento de esta.
·
Implantar
o mejorar sistemas y procesos.
o
También
se contratan especialistas cuando se desea implantar sistemas o procesos nuevos
o mejorar los ya existentes. Se puede corregir una situación que se ha
deteriorado, o mejorar una situación, o crear una situación totalmente nueva.
·
Consultoría
general profesional.
o
La
empresa requiere una consultoría profesional multidisciplinaria, cuando el empresario
no sabe que tipo de ayuda requiere pero detecta que las cosas no van bien.
Otras
razones por lo que las empresas llamas a un consultor son:
·
Los
miembros de la empresa están demasiados influidos por su involucramiento en la
operación diaria, por sus tradiciones o hábitos establecidos y no pueden encontrar
el verdadero origen del problema y proponer soluciones novedosas y factibles.
·
No
disponen de personas capaces de enfrentarse con determinado problema con la
misma probabilidad de éxito que un especialista.
·
La
empresa requiere de Implantar procesos de mejora continua, reingeniería, determinadas
técnicas de dirección y/o utilizar tecnologías avanzadas.
·
Desarrollar
y/o eficientar sistemas y procesos de dirección administración, operación y
control.
·
Ajustar
estructuras organizacionales.
·
Planear
el lanzamiento de nuevos productos
·
Determinar
necesidades de capacitación.
·
Solucionar
problemas financieros.
·
Eficientar
el manejo de los recursos en general.
·
Implantar
metodologías de evaluación y seguimiento.
·
Desarrollar
una cultura de calidad total.
·
Plantear
nuevas estrategias de desarrollo.
Los
beneficios de contratar consultores profesionales se pueden resumir en:
·
Aprovechar su
capacidad de resolver problemas de corrección, de perfeccionamiento y de
creación.
·
Recibir
ayuda intensiva en forma transitoria.
·
Obtener
un punto de vista imparcial y novedoso en la solución de problemas.
·
Facilitar
el acceso y adaptación a nuevas tecnologías, mercados y retos.
·
Utilizar
criterios de medición e instrumentos para determinar estilos gerenciales, formas
típicas de operación en equipo, la filosofía y la misión corporativa, el grado
en el cual se entrelazan las áreas y diagnosticar sistemas y procesos.
·
Definir
las debilidades y fortalezas de la empresa, las fuerzas de resistencia y cambio
dentro y fuera, la forma en que opera como sistema y los criterios adecuados
para lograr su salud corporativa y financiera.
·
Establecer
un programa de implantación de soluciones y en algunos casos, poner en práctica
las soluciones sugeridas.
·
Utilizar
expertos que tienen conocimientos y capacidades especiales.
·
Bajar
costos y aumentar la rentabilidad de la inversión.
·
Para
evitar errores de interpretación en cuanto al alcance de la consultoría, los responsables
de la contratación del servicio, deben de decidir hasta donde quieren que
llegue el grupo de consultores.
·
Es
importante que el cliente y los consultores definan con precisión las áreas, procesos
e indicadores que se pretenden mejorar, los limites de la intervención y en que
etapa se deberá retirar el grupo de consultores.
Hoy, las empresas
competitivas, son necesariamente las empresas intensivas en conocimiento. La
consultoría puede desempeñar un papel muy útil como detonador del desarrollo económico
y social de las empresas y del país.